El domingo pasado, las siete embarcaciones zarparon de la isla de Sharjah (Emiratos Árabes Unidos) rumbo a las costas de China y la ciudad de Sanya iniciando así al segundo tramo de la tercera etapa de la vuelta al mundo del Volvo Ocean Race. Este tramo es el más difícil de la competencia ya que se exponen a ciertas zonas donde es popularmente conocido como zona pirata.
"El tráfico de mercantes también es realmente peligroso. Creo que es lo más peligroso que podemos tener en esta regata. Hay que pasar todo Singapur, donde hay un tráfico muy intenso. Todavía recuerdo la edición de 2008, que fue casi como ir por una autopista por el carril contrario", reconoce el competidor español, Iker Martínez.
La Etapa 3 se dividió en dos tramos por motivos de seguridad. El primero consistió en un corto sprint de 106 millas náuticas entre Abu Dhabi y Sharjah, que repartió el 20% de la puntuación de la etapa. El ganador fue Abu Dhabi Ocean Racing. Allí, la flota fue subida a un carguero armado.
El segundo tramo de la etapa repartirá el 80% restante de los puntos: 24 para el ganador, 20, 16, 12, 8 y 4 para los siguientes clasificados. Se da la circunstancia que el equipo chino Sanya, que se espera pueda llegar al puerto que lleva su nombre al final de esta etapa, consiguió unirse al resto de la flota el pasado jueves. Hasta el momento, solo ha disputado un 20% de la ruta prevista por la organización debido a la deslaminación de su casco en la primera etapa y por las roturas en el aparejo en la segunda que le obligaron a buscar refugio en tierra.
No hay comentarios:
Publicar un comentario